Antes de comenzar se debe dejar claro que no todo es diseño de envases o packaging personalizado, ya que formamos parte de una economía de mercado. Esta se podría definir como la organización y asignación de la producción y el consumo de los bienes y servicios que surgen entre la oferta y la demanda, una demanda que en la mayoría de las ocasiones se haya mediatizada por el diseño de etiquetas, estuches, cajas personalizadas… es decir el packaging a medida.
En una economía de mercado, productores y consumidores interactúan. Funcionan como actores, ofreciendo y demandando bienes y servicios, condicionando el mercado e influyendo en la evolución de los precios.
Llegados aquí, sobra decir lo importancia que supone diferenciarse de la competencia con un packaging personalizado online y la importancia que tiene lograr superarla aportando ideas novedosas: packaging Vigo, packaging ecológico, etc. Una lucha constante en el que el vencedor será el más intuitivo, el más valiente y a la vez, el más conservador… es complicado hablar de la fórmula perfecta para llegar al consumidor de la manera idónea. Son un conjunto de ideas y estrategias en constante evolución que acaban siendo el detonante para que la balanza se incline a favor de uno u otro.
Cuando creamos y ofrecemos un producto y el consumidor ya lo adquirido, queda el último detalle, pero no por ello menos importante, hacérselo llegar de la mejor manera posible con packaging original. Lo que el cliente perciba será un factor clave que marcará la diferencia y conseguirá fidelizarlo, haciendo que su compra haya sido satisfactoria o por el contrario, se habrá perdido un cliente y muchos que podrían venir detrás.
De ahí surge la importancia del packgaging, el envase y el embalaje, así como entender cuáles son las diferencias entre ellos, vamos allá:
- El envase que se conoce también como “embalaje primario” es cualquier recipiente, lata o envoltura propia que contenga directamente el producto protegiéndolo de los agentes externos.
- El packaging también denominado “embalaje secundario” es un término que engloba la ciencia, el arte y la tecnología de inclusión o protección de bienes para su manipulación, almacenaje, distribución y posterior venta. Este es el material que salvaguarda al envase. Así, además de protegerlo facilita su comercialización atrayendo al cliente final trasmitiendo la imagen de la empresa y toda la información sobre el producto.
- El embalaje para presentar productos o “embalaje terciario” lo constituye el material encargado de proteger, reforzar, conservar y almacenar un producto en grandes cantidades. Sería pues la caja externa o envoltura final del producto.
A la hora de diseñar un packaging de calidad, hay que tener en cuenta varias cosas para hacerlo con éxito y no construir simplemente una caja para presentar productos:
- Lo primero es saber a quién va dirigido. En el caso de que no esté completamente definido de deberá crear un perfil falso de una persona imaginaria, es lo que en marketing denominamos Buyer Persona para concretar los detalles más pequeños, ya que diseñar algo para la nada o para un todo puede resultar un trabajo extremadamente complicado. Eso no quiere decir que el producto vaya dirigido solo a ese tipo de persona.
- Investigar el entorno es muy importante, conocer la competencia directa o indirecta y como se puede diferenciar e incluso, estudiar patrones culturales de cada país para que el producto sea acorde a su cliente final.
- Usar colores de marca para que la gente identifique el producto nada más verlo supondrá hacer crecer tu marca y que sea reconocida e identificada nada más verla por los consumidores.
Estas serían las diferencias principales entre estos tres conceptos y una vez comprendidos entenderemos que la mayor parte de los productos se encuentran dentro de un envase, el cual a su vez va protegido por el packgaging con toda la información e identificación del producto y este finalmente se protege por una caja exterior pensada para su almacenaje y posterior transporte, sin que se ocasionen daños en el producto/los productos.
Pero su importancia no termina aquí, existe otro factor vital tan importante como los anteriores y no es otro que la fase de adquisición del producto, la fase en que entra en juego el neuromarketing, pues la mayoría de las decisiones de compra no se hacen de forma racional, sino que son adoptadas desde la emoción y los sentimientos y por eso, es tan importante contar con estímulos directos que influyan positivamente en el comprador para elegir nuestro producto y no otro. Así pues, el marketing de atracción actúa poderosamente a través del envase y packaging y este se convierte en un elemento decisivo de compra. Esta es la razón por la que desde el departamento de creatividad de Plan B nos esforzamos en crear envases y packaging reconocibles que seduzcan al consumidor y que lo enamoren, siendo esta una de las mayores garantías del éxito del producto.